Corrosión

 

¿Qué es La Corrosión?


La mayoría de los metales se encuentran en la naturaleza de forma de óxidos o sulfuros, y solo pueden obtenerse de estos compuestos naturales mediante la aportación de grandes cantidades de energía. Los metales así obtenidos se encuentran en una situación inestable, y en contacto con el medio ambiente ( atmósfera, agua, suelo, etc. ), tienden a recuperar su estado natural. Esta tendencia es lo que origina la corrosión. En el caso particular del hierro y de los aceros la corrosión da lugar a su transformación progresiva en óxidos de hierro hidratados, con la consiguiente destrucción de los mismos. La reacción química que tiene lugar puede ilustrarse de forma simplificada:

2 Fe + 20 + 2H₂ 0 = 2 Fe 0H₂ 0

hierro ( medio ambiente ) oxido de hierro hidratado


Es decir, siempre que el hierro o el acero estén en contacto con el medio ambiente natural se producirá su corrosión.

RESISTENCIA EN LA CORROSION DEL ACERO GALVANIZADO

Los recubrimientos galvanizados en caliente sobre el hierro o acero presentan las siguientes características generales:

PROTECCIÓN AL METAL 

Proporcionan protección al metal de base al aislarlo del medio ambiente. Esta protección por pantalla es muy eficaz, puesto que el zinc, a pesar de ser un metal menos noble que el hierro, se corroe mucho mas lentamente que este debido a que cuando esta en contacto con el aire el agua se recubre rápidamente de una película superficial muy estable e insoluble de carbonatos básicos del zinc, que impiden el progreso de la corrosión.

PASO DEL TIEMPO

Si por cualquier circunstancia (golpe, raspadura, etc.) quedan al descubierto alguna zona del acero base, entonces , al contrario de lo que ocurre en caso de los recubrimientos de metales mas nobles que el hierro, el ataque corrosivo se orientara hacia el recubrimiento del zinc; como por otra parte, los productos que se forman en la corrosión del zinc son mucho mas voluminosos que el zinc del que proceden, estos productos llegan incluso a taponar las pequeñas zonas del metal de base que habían quedado al descubierto y, con ello, se detiene el proceso de corrosión.

PROTECCION 

La eficacia de la protección que proporcionan los recubrimientos de zinc sobre el hierro y el acero es perfectamente comportable en todo momento, ya que, al ser el zinc un metal menos noble que el hierro, podemos asegurar que mientras quede recubrimiento de zinc sobre la superficie del material, este seguirá protegido de la corrosión.